La ciudad de Ámsterdam (Países Bajos) ha dicho basta al turismo de cruceros en sus canales. El Ayuntamiento ha decidido prohibir estos grandes buques en su búsqueda de reducir la polución y la masificación turística en la capital neerlandesa. Esta nueva prohibición se une a otras aplicadas anteriormente como la de los tours por el Barrio Rojo o la de fumar cannabis en la vía pública.

La decisión del consistorio amsterdamés afectará directamente a la terminal de cruceros ubicada en el río IJ, que tendrá que cerrar por inactividad. “Los cruceros en el centro no encajan con el objetivo de Ámsterdam de reducir el número de turistas”, ha declarado Ilana Rooderkerk, portavoz del Ayuntamiento capitalino.

La ciudad lleva tiempo adoptando medidas para frenar la masificación y mejorar el aire que se respira en sus calles. Un estudio realizado en 2021 a un gran crucero halló que el buque había emitido los mismos niveles de óxidos de nitrógeno en un solo día que el equivalente a 30.000 camiones.