Ámsterdam (Países Bajos) ha anunciado un plan destinado a combatir los efectos negativos del turismo de masas y de "borrachera". En este, destaca la prohibición del consumo de cannabis en las calles del casco antiguo de Ámsterdam —en el que también se encuentra el popular 'Barrio Rojo'— a partir de mediados de mayo.

Así, la capital de Países Bajos pretende reducir su atractivo como destino a perfiles de visitantes que estarían generando —tanto por su comportamiento como por la alta afluencia— una gran cantidad de ruido y residuos, hechos que habrían indignado a los habitantes de la urbe. 

“Si las molestias no disminuyen lo suficiente, investigaremos si podemos prohibir fumar en las terrazas de los coffee shops", han advertido desde el Ayuntamiento de la ciudad neerlandesa, entidad que afirma que el turismo de masas está relacionado con el abuso de alcohol y drogas en la vía pública, además de atraer su presencia a "vendedores ambulantes que a su vez provocan delincuencia e inseguridad".

Ámsterdam prohíbe el consumo de cannabis para aumentar la calidad del turismo

Ámsterdam prohíbe el consumo de cannabis para aumentar la calidad del turismo

Limitaciones a la hostelería y la prostitución
 

Sin embargo, la limitación del consumo de marihuana no será la única restricción impulsada por las autoridades. La hostelería y los locales de prostitución tendrán que cerrar sus puertas más pronto de lo que lo hacen actualmente, especialmente los fines de semana, y se restringirá aún más la venta de alcohol en la zona, a pesar de estar ya prohibida en comercios y cafeterías de jueves a domingo, a partir de las 16:00 horas.

Vecinos y empresarios locales tendrán cerca de un mes para aportar su visión sobre las iniciales propuestas, antes de que el pleno del Ayuntamiento debata las medidas. De ser aprobadas, entrarían en vigor a mediados de mayo.

Restricciones al ocio en Ámsterdam: Ni la primera, ni la última


No es la primera vez que Ámsterdam toma medidas para mejorar la calidad del turismo. Cabe recordar que, anteriormente, el Ayuntamiento de Ámsterdam impuso restricciones a las visitas guiadas al Barrio Rojo, para garantizar el respeto a los trabajadoras sexuales. Así, estableció una normativa que obliga a los usuarios de estas rutas guiadas a colocarse de espaldas a los escaparates donde se exhiben las prostitutas, a las que está prohibido tomar fotos.