Más malas noticias para el sector turístico de Estados Unidos. Al descenso de las llegadas de turistas internacionales que se ha producido tras la llegada, hace un año, de Donald Trump a la presidencia del país, se suma ahora el cierre al público de algunas de las principales atracciones turísticas.

La negativa del Congreso de EE.UU. (legislativo) a aceptar los presupuestos que financien la administración federal ha llevado al país a una situación de ‘shutdown’ (cierre) que supone que los servicios menos esenciales de la nación queden paralizados. Entre ellos se encuentran algunos que afectan muy específicamente a los turistas: los parques, los museos, los zoológicos y los monumentos.

Entre los lugares afectados por el cierre, que comenzó el pasado sábado, se encuentran la campana de la libertad y el ‘Independence Hall’, en Filadelfia; la casa de Martin Luther King Jr, en Atlanta; o algunas de las entradas del Parque Nacional de los Everglades de Florida.

Por su parte, otros enclaves en Nueva York como la Isla de Ellis y la Isla de la Libertad, donde se ubica la emblemática Estatua de la Libertad, estuvieron cerradas durante el fin de semana pasado, abriendo, según el ‘Seattle Times’ sus puertas ayer. Trump también ha desvelado que los Parques Nacionales permanecerán abiertos en la medida de lo posible.

Organizaciones como el Smithsonian han anunciado que abrirán sus 19 museos gratuitos en Washington D.C. y el zoológico de la ciudad gracias a los fondos del año anterior.