Los mercados municipales se han convertido en un inesperado atractivo turístico de muchas ciudades, siendo el principal exponente de las tradiciones y de la gastronomía local. La afluencia de visitantes ha afectado al funcionamiento normal de estos recintos, sin embargo, en la ciudad de Alicante han dado con la solución.
Tal y como recoge el diario Información, la implantación de un Decálogo de Buenas Prácticas, suscrito entre el Patronato de Turismo y la Asociación de Guías Oficiales el pasado mes de diciembre, ha dado sus frutos.
Los propietarios de los puestos admiten que la medida ha tenido un impacto positivo y que ha mejorado la convivencia entre turistas y clientes habituales. Celebran que la colaboración con los guías ha sido clave para evitar molestias como el ruido de los megáfonos o la afluencia en grupos demasiado grandes.
Los “10 Mandamientos” para la convivencia
El “Decálogo de Buenas Prácticas” incluye como medidas destacadas que las visitas se coordinen para evitar coincidir varios grupos en el mismo lugar de manera que los visitantes puedan disfrutar del espacio al tiempo que se reduzcan las molestias para el desarrollo de la actividad normal de la ciudad.
Los guías de turismo se comprometieron a emplear sistemas de audio individualizados para ofrecer sus explicaciones a los turistas, y evitarán utilizar megáfonos o micrófonos para reducir la contaminación acústica y las posibles molestias a los vecinos. Además, los profesionales tendrán en cuenta el lugar donde detener al grupo para que afecte en la menor medida posible al tránsito. Asimismo, los guías también se promueve el consumo de producto alicantino y el respeto al entorno.