La crisis del coronavirus ha obligado a agudizar el ingenio y son muchas las empresas que buscan soluciones a esta pandemia. Por un lado, a través del desarrollo de nuevos medicamentos y vacunas, pero también, los más creativos, diseñando productos que que eviten el contagio, sin renunciar a hábitos anteriores a esta situación, especialmente en aquellos sectores que se han visto más afectados por la pandemia, como es el turístico.

En este contexto, Production Club, una compañía de eventos musicales estadounidense cofundada por un español, ha ideado un atuendo para no renunciar a este tipo de festejos, que posiblemente podría ser de utilidad para otros muchas situaciones cotidianas o vacacionales. Lo cierto es que los expertos estiman que los grandes conciertos y festivales serán de los últimos en recuperarse, debido a que implican la aglomeración de personas.

Según informa El Mundo, el traje, dotado de última tecnología, recibe el nombre de Micrashell. De acuerdo con el head of inventions de Production Club, Miguel Risueño, este atuendo "protege de virus transmitidos por vía aérea, es fácil de controlar, de diseño actual y atractivo, desinfectable y fácil de poner". Lo más importante, sin embargo, es que "permite socializarse sin tener que estar físicamente separados", lo que supone un "alivio" para las industrias que "dependen de la interacción social". 

El traje

El atuendo recuerda al de los Power Rangers, pese a ello su estética no es lo más llamativo, sino su componente tecnológico. Por ejemplo, cuenta con un casco transparente, para poder ver y ser visto, que dispone de un sistema de filtración de partículas. El diseño, elaborado con materiales de alto rendimiento y resistentes a los cortes, "solo cubre la mitad superior del cuerpo, lo que permite al usuario vestirse fácilmente y usar el aseo (también mantener relaciones sexuales) sin tener que quitarse el traje". 

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Foto: El Mundo

A su vez, cuenta con un sistema inalámbrico de comunicación por voz, que permite la realización de llamadas, nivelar el audio de las fuentes externas o modificar la voz. También, con un bolsillo con carga para el móvil y con cámara para sacar fotografías, ver lo que el casco no permite y un sistema de visión inteligente. Este atuendo, incluso, permite consumir bebidas o fumar cigarrillos electrónicos, "a través de unas cápsulas diseñadas y ajustadas en la parte de abajo del casco". 

Otro de sus atractivos, es un juego de luces que permite comunicar emociones o mensajes. De acuerdo con Production Club, no se trata de un juego, pues ya han solicitado la patente en Estados Unidos y tienen intenciones de comercializarlo.