Ante la crisis, las empresas se reinventan. O directamente emprenden un cambio radical. Este es el caso de la agencia de viajes Fortex en Rheinfelden (Alemania), que ha pasado de vender paquetes vacacionales a gominolas.

Todo comenzó hace tres años como una broma. El director, Dietmar Baum y la encargada de la oficina, Tina Brutschin, pensaron en vender ositos de goma, además de los viajes. Sin embargo, no pudieron llevar a cabo la idea por falta de espacio.

Cuando la agencia se mudó a una oficina más grande, la idea volvió a resurgir y cuando estalló la pandemia, los ositos de goma fueron la única opción de venta en la oficina, ya que los viajes no podían realizarse debido a las restricciones.

La principal razón por la que han optado por vender gominolas en la agencia ha sido porque Baum y Brutschin son “muy golosos”. “Soy una fanática de los ositos de goma y a Dietmar Baum le encanta el regaliz”, ha confesado Brutschin al medio alemán FVW.

La venta de golosinas comenzó en verano de 2020 y, según cuentan los protagonistas, tuvo su verdadero auge durante las navidades. Aunque admiten que las ganancias no se comparan con las de la venta de viajes, las gominolas les han permitido mantener en prácticas a la becaria Michelle Betler y, además, “los ositos de goma consiguieron levantar los ánimos”.