(actualizado a las 20:30 hs.) 

Cuando las dudas sobre la liquidez de la aerolínea chárter vacacional Germania parecían disipadas, ha saltado la sorpresa pues la compañía alemana se ha declarado en quiebra ante los juzgados del distrito de Amtsgericht Berlin-Charlottenburg (Berlín, Alemania).

Pese a que la declaración tuvo lugar durante la jornada del lunes, ha sido ahora cuando se ha hecho pública. Germania, que transportaba a más de 4 millones de pasajeros a más de 60 destinos vacacionales de Europa, el norte de África y Oriente Medio, ha cancelado todos sus vuelos a partir de la pasada madrugada, del 4 al 5 de febrero.

La aerolínea contaba con una flota de dieciocho Airbus A319 y seis A321. A su vez, sumaba otros cuatro Boeing 737-700 que iban a ser retirados y tenía un pedido en firme de veinticinco Airbus A320neo, de los que esperaba recibir la primera unidad a principios de 2020.

En el comunicado publicado en su página web, Karsten Balke, CEO y propietario de la compañía, ha explicado que les ha sido imposible solventar su problema de liquidez: “No hemos podido completar con éxito nuestros esfuerzos de financiación para satisfacer las necesidades de liquidez a corto plazo y lamentamos mucho que, como consecuencia, no tengamos más remedio que declararnos en quiebra".

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Karsten Balke, Chief Executive Officer der Germania © Germania

Balke también ha pedido disculpas a los empleados afectados y ha agradecido su gran trabajo “incluso en las últimas estresante semanas”. Asimismo, ha pedido perdón a los pasajeros que se han visto perjudicados.

La quiebra se extiende a las compañías Germania Fluggesellschaft GmbH (empresa original fundada en Colonia en 1986), la empresa de servicios técnicos Germania Technik Brandenburg GmbH y su compañía de servicios aéreos Germania Flugdienste GmbH. Por el momento, la filial suiza Germania Flug AG (fundada en 2014) y la búlgara Bulgarian Eagle (2016) no se ven afectadas.

España como protagonista

Tal y como indica el medio International Flight Network, la última operación de la compañía se realizó ayer, martes 4 de febrero. El vuelo ST3711 partió de la isla de Fuerteventura y llegó a la una de la madrugada al Aeropuerto de Núremberg. El avión que llevó a cabo esta última conexión era un Airbus A319 con matrícula D-ASTO.

En este sentido, el director de Turismo de Fuerteventura, Moisés Jorge Naranjo, ha manifestado en declaraciones a Tourinews, que la quiebra de Germania ha supuesto un “duro golpe para la isla de Fuerteventura”, ya que mantenía, durante esta temporada de invierno, “15 vuelos semanales desde Alemania a Fuerteventura, lo que viene a suponer unos 2.500 pasajeros a la semana, 10.000 al mes y 60.000 durante toda la temporada”.

Naranjo aseguró que Turismo de Fuerteventura recibió la noticia en la madrugada del 5 de febrero, ya que estaba en alerta porque había un vuelo programado desde Berlín a Fuerteventura, que finalmente “fue cancelado”. Muchos de esos viajeros habían realizado sus reservas con touroperadores, por lo que pudieron ser reubicados. Mientras, los que reservaron directamente con la aerolínea se vieron beneficiados por las ofertas de otras compañías, como Eurowings, Condor o easyJet.  

El director confió en que otras aerolíneas “puedan hacerse cargo del hueco que deja ahora Germania, porque la verdad es que es un problema serio" teniendo en cuenta el número de vuelos semanales a la isla canaria, "desde diferentes ciudades alemanas y durante todo el invierno”.

Azafatas de la aerolínea Germania

Azafatas de la aerolínea Germania © Germania

A Turismo de Fuerteventura, a su vez, la noticia no le ha pillado por sorpresa, ya que llevaba un mes y medio siguiendo de cerca la situación financiera de Germania. Por ello, había lanzado una advertencia al sector turístico de la isla. Por otro lado, Naranjo confirmó que varios pasajeros alemanes, que habían realizado su reserva de forma directa con la aerolínea, se pusieron en contacto con la entidad, cuyo consejo ha sido seguir las indicaciones del Gobierno germano: que reclamen por la vía judicial o realicen nuevas reservas “aprovechando las ventajas que están ofreciendo otras compañías alemanas a los afectados”.

Duras consecuencias para los touroperadores

Esta noticia supone un duro golpe para algunos de los principales touroperadores de Alemania, como TUI, FTI, Schauinsland y DER Touristik, listados entre los principales clientes de la aerolínea. De hecho, el 60% de la capacidad de Germania era contratada por los TT.OO.

En el citado comunicado se recomiendo a aquellas personas que hayan adquirido un paquete vacacional que incluye vuelos operados con Germania que contacten con su operador turístico para ser, posiblemente, reubicados en otros vuelos. Peor suerte corren aquellos clientes que hayan adquirido su billete directamente a través de la aerolínea, ya que es improbable que puedan ser recolocados en otra compañía y para recuperar su dinero tendrán que recurrir a la vía judicial.

Por el momento, tal y como recoge ha anunciado la Asociación Federal de la Industria del Transporte Aéreo de Alemania, las aerolíneas Lufthansa, Eurowings, SWISS y Austrian Airlines (todas ellas del grupo Lufthansa), junto a Condor (Thomas Cook Group) y Tuifly están ofreciendo ayuda a los clientes de la malograda Germania que se han quedado varados en el extranjero. Las compañías están reservando asientos de regreso para los afectados y les están ofreciendo descuentos del 50% en el precio del billete.

Avión de Germania

Avión de Germania © Germania

La crisis de las aerolíneas europeas

Germania se une así al largo listado de compañías aéreas europeas que han tenido que cesar su negocio durante el pasado 2018, cuando desaparecieron la filial alemana de Small Planet, la danesa Primera Air, la belga VLM, la griega Olympus, la filial alemana de Azur Air (aerolínea del touroperador Anex Tour), la suiza SkyWork, la hispano-venezolana Santa Bárbara Airlines, la británica Cello Aviation o la chipriota Cobalt Air.

A ellas cabe sumar la reciente eliminación de Joon, la ‘low cost’ para millennials del grupo Air France-KLM.

Anteriormente, 2017 fue un año marcado por la quiebra de Monarch, de Air Berlin y de Niki, que resurgió bajo el amparo de Ryanair como Laudamotion, así como por la deriva económica de una Alitalia declarada insolvente y actualmente bajo control estatal.