Un tema principal está copando la prensa británica: las restricciones de viaje que mantiene el gobierno está lastrando la recuperación del turismo y mantiene al país por debajo de los niveles de crecimiento de los países de la Unión Europea.
El diagnóstico por parte de las empresas turísticas británicas se puede resumir así: hay una alta demanda latente que no termina de explotar por los temores en los cambios de estatus en el semáforo de riesgo y, sobre todo, a causa de los elevados costes de las PCR —siendo obligatorios incluso para los viajeros que regresan de países “verdes” y “ámbar” aunque estén vacunados—.
Investigación oficial abierta
De hecho, este planteamiento se ha visto reforzado por la Autoridad reguladora de los Mercados y la Competencia (CMA) que ha iniciado una investigación sobre el precio de las PCR. La autoridad no solo está analizando si las empresas proveedoras de resultados de estos test están vulnerando la ley del consumidor, sino que además está evaluando si hay problemas estructurales en el mercado que afectan al precio o la fiabilidad.
Asimismo, estudia si el Gobierno encabezado por Boris Johnson puede tomar “acciones inmediatas” para reducir los precios. "No dudaremos en tomar medidas de cumplimiento si encontramos evidencia de que los proveedores de PCR están violando la ley", afirmó George Lusty, director sénior de protección del consumidor de CMA, quien añadió “es un tema particularmente urgente en este momento para las familias que esperan disfrutar de unas merecidas vacaciones después de un año tan difícil, y para aquellos que se reencuentran con amigos y parientes en el extranjero”.
“No se debe permitir que la recuperación de los viajes en el Reino Unido se quede por detrás de la de Estados Unidos y Europa”
Justamente la reducción de precios es una de las mayores reivindicaciones que enarbolan las empresas del sector, encabezadas por los principales aeropuertos del país. Stewart Wingate, director ejecutivo del Aeropuerto de Londres-Gatwick, ha reclamado que el gobierno “actúe ya” y elimine los requisitos de pruebas PCR “innecesarios y costosos para los pasajeros, especialmente para aquellos con doble pauta de vacuna”.
“No se debe permitir que la recuperación de los viajes en el Reino Unido se quede por detrás de la de Estados Unidos y Europa”, añadió.
Karen Smart, directora gerente del Aeropuerto Mánchester, también ha reclamado que se eliminen los test Covid-19 con costes prohibitivos. “No veremos una recuperación sostenida adecuada hasta que el Reino Unido revise su costoso y restrictivo régimen de viajes, que está fuera de sintonía con el resto de Europa”, recalcó.
