Un 53% de los británicos tiene la intención de irse de vacaciones al extranjero este año debido al encarecimiento de los viajes dentro del país. Esto es lo que revela una encuesta realizada a 2.000 británicos por Post Office Travel Money, el principal proveedor de divisas extranjeras de Reino Unido, como parte de su Informe Anual de Gastos de Vacaciones.

Además, el mismo informe revela que más de la mitad de quienes planean sus vacaciones fuera de sus fronteras ha decidido aumentar su presupuesto, pero una “minoría significativa” del 24% se ha visto obligada a reducirlo o a elegir destinos más económicos, debido a que el aumento del costo de la vida les deja menos dinero disponible para gastar en sus viajes.
 

Ciudad de Londres, Reino Unido

Ciudad de Londres, Reino Unido
 

En ese sentido, los factores más importantes a la hora de tomar decisiones sobre las vacaciones fueron el coste del alojamiento (82%), el medio de transporte (76%) y los gastos en el destino (68%).

Todo incluido para evitar gasto extra en el destino


Otra de las consecuencias es que las vacaciones con todo incluido serán las más populares, sobre todo entre las familias (48%), haciendo que el porcentaje de familias que planean autoabastecerse en el destino haya disminuido en un 5% con respecto al año pasado.

Esto se produce en un contexto en el que siete de cada diez turistas admiten haber gastado hasta un 38% más de lo presupuestado en su última escapada al extranjero. Además, el 63% de los viajeros dijo que se había sentido estafado en cuanto al precio de las comidas y las bebidas en las aerolíneas, el costo de las excursiones y atracciones y los cargos obligatorios por los servicios en los restaurantes locales.
 


 

Por tanto, el todo incluido parece ser la fórmula para evitar ese gasto extra en el destino que descontrola el presupuesto, aunque en los últimos ocho años también ha aumentado el número de resorts que incluyen menos artículos en su paquete y cobran un suplemento a aquellos clientes que quieren disfrutar de marcas locales, refrescos o bebidas alcohólicas, por ejemplo. Según el informe, los británicos están dispuestos a asumir ese coste, pero restringen sus gastos fuera del resort.