La apuesta por el vehículo eléctrico le ha salido rana a la multinacional del rent a car Hertz, que al cierre del ejercicio 2023 ha visto como su beneficio se reducía en un 70%.

La compañía estadounidense, que hace poco más de un mes anunciaba la puesta en venta de nada menos que 20.000 automóviles electrificados para volver a comprar unidades de combustión, ha pasado de ganar más de 2.000 millones de dólares, a poco más de 600.

El propio presidente y CEO de Hertz, Stephen Scherr, ha reconocido que este agujero económico se ha debido en gran medida a la gran apuesta realizada para electrificar la flota. “Seguimos enfrentándonos a vientos en contra relacionados con nuestra flota de vehículos eléctricos y otros costes a lo largo del trimestre”, ha reconocido Scherr en una nota en la que se han publicado los datos financieros sin auditar de la compañía respectivos al año fiscal 2023.

El máximo mandatario de Hertz ha apuntado, asimismo, que ya han elaborado un nuevo “plan de rentabilidad mejorada” y que confían en que la “reducción planificada de vehículos eléctricos”, junto con otras iniciativas, les permita mejorar el rendimiento financiero durante el presente 2024.