El ‘pasaporte de vacunación’ ideado por la Unión Europea finalmente no servirá para viajar sin restricciones. Los 27 países miembros han decidido en el Consejo de la UE que se reservan el derecho a que cada uno de ellos decida las medidas que aplica a las personas vacunadas, desde cuarentenas hasta la presentación obligatoria de PCR o test similares. En caso de imponer tales restricciones a las personas vacunadas, se deberá informar con una antelación de 48 horas y especificar el motivo para adoptarlas.

Según ha acordado el Consejo, el certificado de vacunación "no será un documento de viaje" y que no garantizará evitar las restricciones. Solamente pretende facilitar y estandarizar documentación. António Costa, primer ministro de Portugal y presidente del Consejo recalcó que de esta forma se aseguran no discriminar a los ciudadanos que no han recibido la vacuna.
 

 António Costa, primer ministro de Portugal y presidente del Consejo. Foto cadenaser.com

 António Costa, primer ministro de Portugal y presidente del Consejo | Foto cadenaser.com

Asimismo, han decidido que el pasaporte tendrá una vigencia de un año, es decir, hasta junio de 2022 según está prevista su aprobación. Originalmente, se había anunciado que tendría iba a tener validez hasta que la Organización Mundial de la Salud diera por finalizada la emergencia sanitaria.

Por el momento, la obtención del documento será gratuita, aunque el debate mantenido en el seno del Consejo de la UE abre la puerta a posibles cobros por “servicios asociados” a su elaboración o de tasas “por pérdidas repetidas” del certificado original.



Una mala noticia para las empresas del sector

Empresas y patronales turísticas han lamentado la decisión. Carlos Garrido, presidente de la Confederación Española de Agencias de Viaje (CEAV), ha declarado en exclusiva a Tourinews que “es una pena que la Unión Europea no haya activado esta figura en materia de turismo”.

"El documento —continúa Garrido—, facilitaría mucho la labor administrativa para los diferentes factores que intervienen en un viaje”, lo que puede suponer una motivación para los turistas a la hora de volver a ir de vacaciones. Según explica el presidente de CEAV, en el caso de las agencias de viajes, al tratarse de un código QR "solo tenían que mandarlo a los hoteles, aeropuertos o aerolíneas", facilitando los trámites para el viajero.