La Asociación Asturiana de Vendedores de Carburantes y Combustibles (Asvecar) impulsa un proyecto para instalar cargadores junto a los surtidores de combustible, en once estaciones de la región, según ha publicado el diario La Nueva España.

Las gasolineras que participan en este plan experimental, repartidas de una forma estratégica por el mapa regional, brindarán a los conductores de vehículos eléctricos un enchufe de uso público cada pocos kilómetros.

Aunque por las carreteras asturianas aún circulan pocos vehículos de estas características, la perspectiva es que cada año se multipliquen; por ello, se pretende, según comenta Marcos Martínez, gerente de la asociación, “instalar toda esta infraestructura pese a que aún no hay demanda para ella”. La previsión apunta a que los enchufes de alta potencia podrían estar montados en esas once gasolineras y estar funcionando este año.

Algunas grandes ciudades europeas, entre ellas Madrid y Barcelona, ya tienen planes para restringir y penalizar a medio plazo la circulación por sus calles de turismos con motor de combustible y premiar a los eléctricos.