Al menos 1.200 personas han muerto y millones han perdido sus hogares, como consecuencia de las devastadoras inundaciones que han afectado a la India, Bangladesh y Nepal.

Considerado uno de los peores desastres que ha afectado la región en muchos años, las agencias de ayuda internacional hablan de miles de aldeas aisladas por las crecidas, así como de la falta de alimentos y agua potable.

Según ha informado el ‘Straits Times’, las inundaciones han afectado a 17 millones de personas en la India. En el estado de Bihar, al este, el número de fallecidos aumentó a más de 500 y la agricultura se ha visto seriamente dañada. 

En Mumbai, el nivel del agua ha subido casi dos metros y las autoridades locales han tenido que evacuar a las personas que viven en zonas bajas de la capital financiera. Los medios de transportes se encuentran totalmente paralizados.

En la vecina Bangladesh, al menos 134 personas han perdido la vida y se cree que por lo menos un tercio del país se encuentra sumergido. Según informó Matthew Marek, responsable de desastres de la Federación Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja en la región, más de 600.000 hectáreas de tierras de cultivo han sido parcialmente dañadas.

“La economía de Bangladesh depende de la agricultura y el país ya perdió alrededor de un millón de toneladas de arroz en las inundaciones del pasado mes de abril”, puntualizó el funcionario.

Por otro lado, en Nepal, la cifra de personas fallecidas se eleva a 150 y 90.000 hogares han quedado destruidos. La ONU ha catalogado este desastre natural como el peor ocurrido en el país en una década.

El sur de Asia sufre inundaciones frecuentes durante la temporada del monzón, que dura de junio a septiembre. Las autoridades se estos países afectados aseguran que las riadas de este año han sido mucho peores.