Al turismo rural le ha aparecido un gran enemigo: los parques eólicos. O al menos así lo piensan algunos vecinos de Guadalajara que han creado una plataforma para evitar la creación de cuatro instalaciones en la zona de Sigüenza y el Alto Henares.

Según explica el diario ‘ABC’, la plataforma de Afectados por los Macroproyectos Eólicos de Sigüenza y Alto Henares (Amesah) quiere hacer lobby para que las administraciones frenen la instalación de cuatro parques de generación eólica en la provincia. Estas instalaciones supondrían la instalación de un total de 150 aerogeneradores

El principal motivo para mostrar su rechazo es que consideran que podría poner en peligro el patrimonio natural que convierte a Guadalajara en un referente del turismo rural en España.

Uno de los miembros de Amesah ha explicado a la agencia Efe que estas construcciones rompen “con el modelo de desarrollo llevada hasta ahora, en el que se ha impulsado el turismo” y cree que estos cambios van a “acabar con ello”.

Desde la citada plataforma critican que los parques eólicos colindan con parques naturales y espacios protegidos, entornos alrededor de los cuales se ha conformado la actividad turística de la región.