Canarias estudia asumir el coste de las pruebas diagnóstico de COVID-19 de los turistas, en aras de garantizar la reactivación el sector. Los test se realizarían en el origen, antes de que los visitantes viajasen a las islas. Se trata de una acción que responde a la "promoción" del archipiélago como destino seguro. Así lo adelantó el portavoz del gobierno canario, Julio Pérez, en rueda de prensa. 

Según ha informado eldiario.es, Pérez señaló que, pese a que todavía no se han terminado de perfilar los protocolos sobre la reactivación de los vuelos internacionales a las islas, lo más probable es que se estipule que los turistas lleguen al destino con algún tipo de "información sanitaria" que acredite que "no están contagiados". 

En este punto, indicó que la realización de test en el ámbito turístico no está exenta de polémica, ya que no se puede "obligar" a los viajeros a someterse a ellos. Por ello, consideró que la clave está en cómo financiarlos. "Si hay que incentivar hacer test, lo haremos, aunque el objetivo es que vengan con el test hecho", enfatizó, poniendo de relieve que Canarias también necesitará una campaña que avale su "seguridad sanitaria" como destino turístico. 

Asimismo, reparó en que el coste de estos test es asumible, aunque "lo ideal" sería que el visitante aterrizara en Canarias con la prueba ya realizada en el origen. "Es más barato financiar los test que financiar el desempleo", aseveró, haciendo alusión a la alta dependencia de la economía canaria del turismo, que en 2018 representó el 35% del PIB de las islas. Cabe destacar que los planes del ejecutivo canario pasan por financiar los test en una primera fase, una vez se reinicie la actividad. A posteriori, el coste debería repartirse entre los turistas, los hoteles o las aerolíneas.