Aprovechando la abundante presencia de sol durante todo el año en Benidorm y la Costa Blanca (Alicante), muchos hoteles se han pasado a las energías renovables, especialmente tras el recrudecimiento de la crisis energética. Uno de cada cuatro hoteles de la zona está actualmente apostando por el uso de placas solares, con el objetivo de alcanzar la sostenibilidad exigida por los clientes y reducir costes a través del autoconsumo. 

Dentro de las placas solares hay dos tipologías extendidas, las solares térmicas, que sirven para calentar el agua, y las solares fotovoltaicas, son dispositivos encargados de captar la radiación solar a través de las células solares para generar energía eléctrica. Estas últimas son las que estarían extendiéndose entre los hoteles alicantinos, para cubrir entre un 10 y un 30% de la demanda eléctrica de dichos establecimientos, según confirman desde la Asociación empresarial hotelera y turística de la Comunidad Valenciana HOSBEC al diario La Información.

"Hay que cubrir a lo que no se llega. Por ejemplo, en las horas de noche que no hay sol y no se genera electricidad, con las placas no se puede llegar a todo el consumo que tiene un hotel con solo este sistema de renovables", ha subrayado la secretaria general de HOSBEC, Nuria Montes.

Aunque es necesaria en muchos casos la combinación de la energía solar con las tradicionales, la instalación de renovables es una opción cada vez más atractiva para los empresarios de la región, gracias también a las subvenciones ofrecidas por los fondos europeos Next Generation, que repartirán 40 millones de euros en la Comunidad Valenciana para el desarrollo de proyectos de sostenibilidad turística.

Sin embargo, la instalación de estos dispositivos tiene otro inconveniente: el espacio que ocupa. Las construcciones verticales y elevadas en altura hacen que haya poco sitio disponible en las azoteas, al igual que las restricciones que limitan la distancia entre el emplazamiento de las placas solares y los puntos de consumo de la energía reducen las opciones. Aun así, la previsión de HOSBEC es que aumente el número de alojamientos que apuestan por las placas en los próximos meses.