Estados Unidos no podrá seguir concediendo unas ayudas fiscales a Boeing, que fueron declaradas ilegales en 2012, por orden del tribunal de apelaciones de la Organización Mundial de Comercio (OMC).

Según ha informado El País, se trata de la última batalla de la guerra que protagonizan Boeing (Estados Unidos) y Airbus (Europa) desde hace 15 años. Así, ambas partes suelen intercambiar denuncias ante el citado organismo, alegando supuestas ayudas de estado a los fabricantes. En esta ocasión, ha triunfado la Unión Europea.

Ya en 2012, la UE denunció el incentivo fiscal que EE.UU. concedía a Boeing en la región donde tiene establecido su centro de producción, en la costa oeste del país, ya que suponía una ventaja frente a Airbus. La OMC falló a favor de la UE, pero EE.UU. pasó por alto la orden. Por ello, Europa volvió a reclamar y el tribunal de apelaciones le ha vuelto a dar la razón.

Se trata del conocido como B&O Tax del Estado de Washington, una rebaja de impuestos valorada en 100 millones de dólares anuales. Precisamente por ello Boeing se ha adjudicado la victoria, ya que la OMC no se ha referido a la acusación europea de que estaba recibiendo ayudas de 10.000 millones.

A este respecto, el fabricante estadounidense asegura que se “comprometió desde el principio a cumplir con las decisiones del organismo multilateral” y que el “B&O no será una excepción”. A su vez, instó a que, tanto Airbus como la Unión Europea, “procedan al cumplimiento de las resoluciones en las que la OMC ha fallado en su contra”.

Ayudas a Airbus

Por su parte, Robert Lighthizer, representante de Comercio Exterior de Estados Unidos, insistió en que los gobiernos europeos “subsidiaron masivamente” al Airbus. “El apoyo que da EE.UU. no es remotamente comparable a las subvenciones excepcionalmente grandes y dañinas que la UE da a Airbus”, sentenció.