Swiss, la principal aerolínea suiza, paralizó repentinamente su flota de Airbus A220 el pasado 15 de octubre, debido a los problemas continuos en los motores. Todo apunta a que estos fallos pueden estar provocados por una actualización del software instalado a principios de año.

Según ha informado On The Wings Aviation, a esta conclusión llegó la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte de Estados Unidos (NTSB, por sus siglas en inglés), con la colaboración de la Oficina de Investigación y Análisis para la Seguridad de la Aviación Civil de Francia (BEA, por sus siglas en francés), que ha estado investigando estos fallos. 

Ahora, los principales reguladores aeronáuticos internacionales, como son la Administración Federal de Aviación (FAA) de Estados Unidos, la Agencia Europea de Seguridad Aérea (EASA) y la Transport Canada Civil Aviation (TCCA), han emitido una directiva de aeronavegavilidad (AD) que limita el uso de los A220 en todas las aerolíneas y no solo en Swiss, que ha sufrido tres incidentes serios por este motivo. 

En concreto, prohíbe sobrepasar el 94% de la potencia disponible por encima de los 8.800 metros de altura. Estos aviones tampoco podrán volar a más de 10.670 metros de altura cuando las condiciones meteorológicas puedan formar hielo. Una vez superados los 8.850 metros (FL290), además, los pilotos están obligados a desactivar el autothrottle (selector de potencia del piloto automático). En caso de dejarlo activado durante más de 20 segundos, deberán informar sobre ello. 

Estras restricciones serán retiradas una vez se encuentre el origen del fallo de estos motores, algo que ya se está investigando. Cabe destacar que existen más de 80 unidades de este modelo de avión en servicio alrededor del globo.