Los pilotos de Ryanair con base en Irlanda y Reino Unido han convocado dos jornadas de huelga para los días 22 y 23 de agosto, unas fechas clave para la aerolínea que está intentando frenar la movilización en los juzgados. Según informa Travel Mole, la compañía aérea busca una orden judicial por parte de los Tribunales Superiores de ambas naciones con el fin de paralizar la huelga.

Desde la Asociación Británica de Pilotos de Aerolíneas (Balpa) critican que la compañía quiere buscar algún “tecnicismo” con el fin de salirse con la suya.

Por su parte, el sindicato irlandés Forsa, matriz de IALPA, ha defendido ante el alto tribunal que la compañía no tiene derecho a impedir las movilizaciones puesto que la aerolínea ha sido incapaz de “acordar o comprometerse” con las propuestas de mejoras de pago presentadas por los trabajadores durante las negociaciones que tuvieron lugar en el mes de marzo. Asimismo, la unión sindical niega que sus protestas vayan a generar consecuencias negativas para los clientes y que la actitud de la compañía la que ha generado estos problemas

El punto de vista de Ryanair

La decisión de las cortes judiciales se conocerá durante la jornada de hoy, en caso de otorgar la orden de paralización, esta estaría vigente hasta que los tribunales arrojasen una sentencia definitiva con respecto a la disputa entre Ryanair y los pilotos.

Desde la compañía encabezada por Michael O’Leary aducen que los sindicatos están incumpliendo el acuerdo alcanzado tras la mediación en 2018. Asimismo, sostienen que las fechas de la acción fueron elegidas para causar la máxima interrupción en su negocio.