La compañía estadounidense Delta Air Lines ha limitado el tiempo que sus pasajeros pueden pasar en su Sky Club Lounge, las salas VIP de las que dispone en los aeropuertos.

La medida ha sido tomada después de que la compañía detectara que los pasajeros extendían sus estadías en el Sky Club más allá de lo necesario, usando el espacio para trabajar de forma remota. Esto, unido al aumento de los viajes, ha provocado problemas de capacidad en las salas de la aerolínea, según informa el diario Gizmodo.

La nueva política de Delta entró en vigor el pasado 1 de junio. Bajo ella, los huéspedes del Sky Club solo pueden acceder a los a las salas dentro de las tres horas anteriores a su vuelo de salida programado y dentro de las tres horas posteriores a su vuelo de llegada, según ha explicado la compañía.

Sin embargo, hay un par de excepciones. Los pasajeros cuyos vuelos se hayan retrasado o que tengan una escala larga en el aeropuerto podrán acceder a las salas de la aerolínea en cualquier momento antes de despegar.

En 2018, la aerolínea dejó de vender pases de un día para el Club para tratar de gestionar problemas de capacidad similares.

Clubs exclusivos


No obstante, los Delta Sky Clubs ya eran bastante, exclusivos incluso antes del cambio de política. Para acceder a las salas del aeropuerto, los clientes tenían que comprar una membresía anual de un coste mínimo de 545 dólares, volar lo suficiente como para alcanzar el nivel superior del programa de viajero frecuente, gastar mucho dinero en primera clase o tener una tarjeta de crédito de calificación especial.

Esta es la primera aerolínea estadounidense que decide tomar medidas en este sentido, aunque las Salas Centurion de American Airlines también tienen un límite de acceso de tres horas.