La violación y el asesinato de una joven mexicana ha llevado a la empresa de transporte Cabify a anunciar que instalará un “botón de pánico” para incrementar la seguridad de sus usuarios.
Mara Fernanda Castilla fue supuestamente asaltada por el conductor de uno de los coches de la firma el pasado 8 de septiembre en el estado de Puebla, que ha procedida a prohibir la actividad de Cabify. La muchacha estuvo desaparecida durante una semana hasta que su cuerpo fue hallado en un barranco.
Ante el revuelo mediático la compañía estadounidense ha anunciado que mejorará los “protocolos de seguridad” desarrollando un “botón de pánico vinculado a los sistemas de emergencia de las autoridades policiales” del lugar donde se ofrezca el servicio. Este sistema alertará tanto de las situaciones de peligro para el usuario como las del conductor.
Además aseguró que facilitará a las autoridades los datos de aquellos conductores que la empresa haya despedido por conductas fuera de la ley. Y es que el sospechoso por el asesinato “había sido despedido por Uber por comportamiento indebido y fue contratado por Cabify”, según asegura Diódoro Carrasco, secretario general de Gobierno de Puebla.
Por otra parte, la empresa ha asegurado que espera que caiga todo el peso de la ley sobre los que han perpetrado el delito.




