Venecia (Italia) ha endurecido las medidas prohibitivas para regular el flujo de turistas que recibe, 25 millones al año, y que dificulta la preservación de la ciudad de los canales, declarada Patrimonio Mundial por la Unesco. El ayuntamiento veneciano considera insuficientes las multas (de entre 100 y 400 euros) y está apostando por implementar otras formas de castigo.

Según ha informado El País, el alcalde de la ciudad, Luigi Brugnaro, ha anunciado que los turistas que realicen actos incívicos, como pasear por la calle borrachos, dar la nota en estado de embriaguez o bañarse en los canales, dormirán en el calabozo. Para ello, ha presentado un proposición de ley en el Parlamento italiano para crear una “celda de seguridad”, donde retener a los turistas que se consideren peligrosos hasta que se calmen.

También se espera aprobar, el próximo septiembre, el Daspo urbano, una medida prensada en su origen para controlar a hooligans del fútbol, pero que finalmente también se aplicará a turistas. En Venecia, esta normativa contempla la expulsión durante 48 horas de quienes cometan actos groseros o molesten a ciudadanos y visitantes. Los delitos que recoge son: orinar en la calle, tumbarse en los bancos o tomar alcohol desde las 19.00 hasta las 8.00 horas fuera del perímetro de los bares o pubs.

El pasado mes de abril el consistorio veneciano ya había aprobado una serie de medidas para restringir el movimiento de turistas y alejar a los vehículos del término capitalino. La ciudad puede decidir el cierre de calles o el desvío de vehículos, así como trasladar embarcaciones de motor de las zonas más céntricas. La urbe también instauró unos tornos para controlar el acceso y así regular el flujo de visitantes. 

La administración local ha aclarado que trabaja para “resolver un problema que desde hace décadas no encuentra solución”, con el objetivo de hacer de Venecia una ciudad “vivible para los residentes”. También, consideró que estas medidas no han frenado la llegada de foráneos aunque “sí han pasado el mensaje de que la gente no debe venir si piensa que puede ir de listilla”.