Las actuales autoridades están cometiendo los mismos errores que las pasadas, pensando que la industria del turismo se limita a aeropuertos y hoteles, olvidando así todos los demás sectores que forman parte de la cadena de valor. 

Es una lástima que los asesores de turismo no sean capaces de ver la foto completa. Por un lado, el ministro Collado hace un llamado a la unidad y, por otro lado, pone al margen sectores tales como touroperadores, agencias de viajes, transportistas turísticos, guías turísticos, suplidores de excursiones, restaurantes, tiendas, gift shops, etc. 

Todo esto, sin dejar de mencionar que, mientras todos los países emisores están apostando para que sus ciudadanos y residentes vacacionen internamente, nuestro equipo de turismo se olvidó completamente del mercado local, el cual esperaba —por ser el cautivo y el que no requiere montarse en un avión— se creara un programa de bono vacacional para incentivar y apalancar este tan importante mercado que, en estos momentos, no solo servirá para dinamizar la industria, sino que también podrá validar y certificar las instalaciones turísticas. Ellos serían los embajadores que promocionarán, vía word of mouth y en sus redes sociales, que estamos listos, que la situación está en orden y bajo control y a partir de ahí, invitamos gradualmente nuestros invitados de fuera para que vengan a visitarnos.

David Collado, ministro de Turismo de la República Dominicana

David Collado, ministro de Turismo de la República Dominicana

La prioridad debió haber sido, antes de abrir el pasado primero de julio, recuperar la confianza y así poder enviar un mensaje de tranquilidad al mundo y en especial a los países emisores. En síntesis, arreglar la casa, enviar un mensaje de tranquilidad y confianza “que la casa está en orden”, que todos los protocolos han sido debidamente socializados y se están cumpliendo al pie de la letra, y que la curva ha sido aplanada.