Maurice Georges y Ángel Luis Arias, máximos responsables de los proveedores de servicios de navegación aérea en Francia y España (DSNA y Enaire, respectivamente), se reunieron el pasado 7 de febrero, en Barcelona, para consolidar el acuerdo alcanzado por ambas partes, que busca minimizar los efectos de la congestión aérea en los Centros de Control de Tráfico Aéreo de Barcelona y Burdeos

También asistió a la cita Eamonn Brennan, director general de EUROCONTROL, la organización europea para la seguridad de la navegación aérea, que quiso conocer de primera mano los planes de actuación y las medidas que se impulsarán. Precisamente, el encuentro, que se celebró en el Centro de Control de ENAIRE, forma parte de las iniciativas promovidas por EUROCONTROL de cara a la temporada de verano 2019.

Georges y Arias quisieron destacar el “espíritu de colaboración y la proactividad de ambos países en el reto de la mejora de la eficiencia global de la red”. Recientemente, las pruebas en vivo transfronterizas lideradas en 2018, entre los Centros de Control de Burdeos y Madrid, bajo el paraguas de un proyecto SESAR 2020, ha supuesto una historia de éxito. Las soluciones han ayudado a distribuir mejor el tráfico entre los sectores y aumentar la previsibilidad de la red”, aseveraron.

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Imagen de la reunión | Foto: Enaire

Otro de los objetivos de la reunión fue promover iniciativas conjuntas entre Francia y España, alineadas con las actuaciones de EUROCONTROL, para dotar de mayor eficiencia el diseño y uso de la red de rutas de ambas naciones. Los proveedores, a su vez, han considerado necesario apoyar la iniciativa de EUROCONTROL de establecer un plan de acción de red específico, para mitigar las restricciones de capacidad de este verano.

ENAIRE, por su parte, ha mostrado su disposición para contribuir en las iniciativas que EUROCONTROL está desarrollando para mitigar los efectos de la falta de capacidad de gestión de tráfico aéreo en países europeos, que podrían desembocar en un caos aéreo durante el verano. El objetivo consiste en asumir la gestión de vuelos adicionales derivados de rutas alternativas de alivio, ayudando así a reducir el impacto de las demoras de áreas congestionadas en el conjunto de la red europea.