San Bartolomé de Tirajana (Gran Canaria) afronta este sábado, 18 de marzo, su fiesta grande con la celebración de la Gran Cabalgata del Carnaval Internacional de Maspalomas, un evento al que se espera que acudan más de 250.000 personas, entre residentes y visitantes internacionales, según las estimaciones del Ayuntamiento.
De hecho, la alcaldesa, Conchi Narváez, ha afirmado que será una fiesta multitudinaria, en la que esperan “superar las cifras de asistencia de anteriores ediciones, pues se trata del primer carnaval normalizado tras la pandemia”. Para este municipio turístico —el tercero con más pernoctaciones turísticas del país solo por detrás de Madrid y Barcelona— estos festejos suponen una oportunidad para difundir su imagen en el exterior.
Si en otras ocasiones se ha puesto el foco en los estragos que causan en Maspalomas los más incivilizados —como en 2019, cuando destrozaron los chiringuitos de Playa del Inglés—, esta vez se está subrayando la mala imagen que pueden dar justamente los kioscos que sustituyeron a los anteriores y que permanecen vandalizados desde octubre de 2022
Pedro José Franco López, técnico en Patrimonio Histórico y Cultural, reconocido por su puesta en valor del patrimonio etnográfico, social, cultural y deportivo del sur de Gran Canaria, ha compartido una publicación en la que la mala imagen que proyectarán los chiringuitos de Playa del Inglés y Maspalomas. “Cuando se les llene la boca de agüilla, diciendo que el Carnaval ha puesto la zona hasta los topes, que sepan que TODOS vieron esto”, ha protestado.
Algunos de los usuarios que han replicado su comentario protestan por la “desidia de los responsables de Litoral-Playas, y de Policía, ya que el vandalismo y hurtos nocturnos suceden día tras día, debido a la inexistencia de patrullas durante la noche en nuestras playas más visitadas”.
“Ha perdido en calidad y atractivo en su zona principal”
Consultado por Tourinews, Tom Smulders, vicepresidente de la Federación de Empresarios de Hostelería y Turismo de Las Palmas (FEHT), destaca que, si bien se han llevado algunas intervenciones como los rompeolas en la zona norte, la playa “ha perdido en calidad y atractivo en su zona principal”. Entre los principales motivos de esta devaluación cita “la falta de kioscos como los que se pueden encontrar en destinos más astutos en la gestión de lo más importante para un turista”.
Rompeolas en Playa del Inglés | Foto: Tom Smulders
Hace, además, un llamamiento para en cooperación público-privada para la mejora del destino. “La mejora en distintos aspectos tiene que ser punto clave en el diálogo entre patronal y ayuntamiento para, después, poder pasarlo a la acción dinámica”, afirma.
Smulders añade que, además del problema de los chiringuitos, otro aspecto que no favorece la imagen del destino, en su opinión, es el “uso casi sin límites del litoral para nudismo”.
A esta larga lista de problemas se suman otros que también llevan arrastrando desde hace tiempo como el mal estado de los centros comerciales, que constituyen la principal fuente para la oferta de compras y ocio en el destino.
