Fin al culebrón protagonizado por el hotel Mandarin Oriental Barcelona, que finalmente ha encontrado comprador para sus lujosas instalaciones frente al mismo paseo de Gracia. El fondo de inversión saudí The Olayan Group ha adquirido el establecimiento al family office andorrano Reig Capital Group, que lo había puesto a la venta hace cuatro meses, así como la deuda de más de 400 millones que arrastra el inmueble y que estaba en manos del fondo estadounidense Farallon Capital.

El equipo de Hotels & Hospitality de la consultora inmobiliaria JLL ha asesorado al vendedor en la operación, una de las mayores de este año en la industria hotelera. Aunque todavía no ha trascendido la cantidad pagada por el fondo saudí, se prevé que esté en el entorno de los 240 millones, precio fijado por Reig Capital para la venta el pasado mes de marzo.

Se da la circunstancia de que The Olayan Group tiene una estrecha vinculación con la marca Mandarin Oriental, ya que comparte la propiedad del Mandarin Oriental Ritz Madrid al 50% con la cadena de alto lujo con sede en Hong Kong (China). 

Mandarin Oriental Barcelona en el paseo de Gracia | Foto: MOB

Mandarin Oriental Barcelona en el paseo de Gracia | Foto: MOB

Este exclusivo hotel está situado en el prestigioso paseo de Gracia, una de las principales vías comerciales del centro de Barcelona. Se trata de un lujoso establecimiento de 5 estrellas con 120 habitaciones que cuenta con un spa de 1.000 m², una piscina en la azotea con espectaculares vistas de la Ciudad Condal y una piscina cubierta, además de dos locales comerciales. 

“El Mandarin Oriental Barcelona es uno de los activos más lujosos de la ciudad, con una ubicación inmejorable y una marca excepcional. Los inversores han mostrado un gran apetito por el activo a pesar del difícil entorno en el mercado de capitales", destaca Patrick Saade, director gerente sénior de Hotels & Hospitality Capital Markets de JLL en Europa, Oriente Medio y África.

“Los inversores son conscientes de que los hoteles de lujo se han convertido en una inversión cada vez más institucional y de que las cambiantes preferencias de los consumidores dan lugar a nuevas oportunidades de inversión. El segmento de hospitality está en el punto de mira de los inversores que buscan desplegar capital en una clase de activos inmobiliarios en constante evolución", añade Saade.