Las principales patronales de restauración y ocio de Baleares —Restauración Mallorca CAEB, la Asociación Menorquina de Cafeterías, Bares y Restaurantes, Pimeef Restauració y la Asociación Balear de Ocio y Entretenimiento (ABONE)— han firmado el XVII Convenio Colectivo de Hostelería pese a manifestar su desacuerdo con la subida salarial del 13,5 %, especialmente con el incremento inicial del 6 %.
Desde dichas patronales aseguran que eran conscientes de que el convenio se aplicaría igualmente y por ello han optado por centrarse en negociar avances reales para sus sectores. Como resultado, se ha logrado incorporar una disposición adicional específica que establece un régimen especial para restauración y ocio.
Se trata de un avance que marca un antes y un después, ya que es la primera vez que se produce esta singularidad. “Era fundamental que el convenio reconociera por fin la especificidad de nuestros sectores. Este régimen especial representa un paso firme hacia una regulación más justa y realista para la restauración y el ocio”, valoran conjuntamente las patronales firmantes.
Esta disposición implica la creación de un marco propio dentro del convenio, diseñado para recoger algunas de las particularidades que afectan a bares, restaurantes, cafeterías y locales de ocio, muchos de ellos con dinámicas de funcionamiento marcadas por temporadas, eventos o aperturas puntuales a lo largo del año.
Entre los principales logros alcanzados, destaca la inclusión de una tabla salarial diferenciada, recogida en un anexo de la propia disposición, que permite clasificar de forma específica los establecimientos ya contemplados en el convenio colectivo. Asimismo, se ha acordado el mantenimiento de una subcomisión paritaria exclusiva para restauración y ocio, que actuará como espacio de trabajo previo a futuras negociaciones, permitiendo abordar con antelación cuestiones concretas que afectan directamente a estos sectores.
Otro avance clave ha sido la reducción del plazo de preaviso para el llamamiento del personal fijo discontinuo, que en el caso de estos sectores pasa a ser de cinco días naturales. Esta medida, avalada por la jurisprudencia más reciente, no resulta aplicable al sector hotelero, que mantiene el preaviso en diez días. Además, se han trasladado al nuevo régimen otras condiciones que ya figuraban en el convenio anterior, como el plus de nocturnidad y la garantía de ocupación, reforzando así su reconocimiento dentro del marco normativo.
Gracias a las negociaciones, se han introducido también mejoras operativas destacadas como la posibilidad de establecer descansos semanales no consecutivos y una mayor flexibilidad en la contratación eventual o temporal, especialmente útil en eventos puntuales fuera de temporada, permitiendo contratos de hasta treinta días sin necesidad de activar previamente a toda la plantilla. “Seguimos defendiendo la necesidad de un marco aún más adaptado a nuestras realidades, pero este acuerdo demuestra que el diálogo técnico y riguroso da resultados”, subrayan las patronales.




