El Tribunal Supremo tendrá que determinar son abusivas o no las cláusulas que permiten a la aerolínea Volotea a aplicar recargos adicionales en el billete de avión, una vez
Desde la Asociación de Usuarios Financieros (Asufin) han presentado un recurso de casación que ha sido admitido por el alto tribunal. El objetivo es que este valore si las prácticas de la compañía asturiana —y, por extensión, del resto de aerolíneas de bajo coste— vulneran los derechos de los usuarios. En concreto, ponen en cuestión la cláusula 4.2 de las condiciones de transporte de Volotea relativa a “impuestos y tasas”, que le permite modificar los precios de los billetes ya vendidos, en función de condicionantes como las tasas que el gestor aeroportuario Aena cobra a la aerolínea.
Esgrimen que podría ser anulada por infringir la jurisprudencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) a la luz de la sentencia, asunto C-290/16, relativa a Air Berlín, en la que señalaba que “al comprar un billete, el cliente debe pagar un precio final y no provisional”.
Desde la entidad de consumidores afirman que, en caso de obtener una resolución favorable por parte del Supremo, “supondría todo un revulsivo para esta modalidad de vuelos”.
Ya logró otras victorias
Lo cierto es que en la batalla que mantienen con Volotea, desde Asufin ya han conseguido triunfos. La aerolínea se vio obligada a cambiar su política de equipajes debido a una sentencia de la Audiencia Provincial de Oviedo. La línea aérea prohibía a “transportar objetos frágiles y/o perecederos, dinero en efectivo o en valores negociables, divisas, valores mobiliarios, piedras y metales preciosos, aparatos electrónicos, ordenadores, objetos de valor y documentos de identidad”, algo que fue anulado por los tribunales.