Este jueves se ha producido un acto vandálico contra el Drago de San Antonio, uno de los árboles más icónicos de la localidad de Icod de los Vinos, en el norte de Tenerife. El drago, de 18 metros de altura y más de 200 años de antigüedad, ha ardido por causa de unos vándalos que le han prendido fuego.

Gracias a la actuación de los equipos de emergencia y seguridad que han intervenido tras el suceso, como la Policía Local, los Bomberos y Protección Civil, se ha logrado sofocar el fuego, que solo afectó a una parte del tronco del centenario árbol.

Las reacciones a este lamentable suceso no se han hecho esperar y Valentín Correa, secretario de la Vicepresidencia Primera del Parlamento de Canarias, ha mostrado su “más rotunda condena y repulsa” y ha catalogado el acto a través de su perfil de Twiter como un “atentado” contra “el patrimonio natural, emblema del Municipio y símbolo de la identidad canaria”.
 


Afortunadamente, este suceso no ha afectado al icónico ‘Drago Milenario’ de Icod, verdadero símbolo de la localidad, presente en su escudo de armas y con una longevidad aproximada entre los 600 y los 700 años.