Los grandes incendios forestales se están convirtiendo en una constante de los veranos de Grecia. Sin ir más lejos, este mismo miércoles se ha declarado por controlado el incendio activo desde el pasado domingo que amenazaba Atenas con llamas de 25 metros de altura. El fuego ha dejado a su paso un muerto, ha provocado la evacuación de 50.000 personas y ha calcinado 10.400 hectáreas, siendo ya catalogado como el peor incendio del año en el país.

Se trata de un nuevo castigo para una área que ha sufrido un importante desgaste en los últimos ocho años. Según un informe del Observatorio Nacional de Atenas (EEA, desde 2017 hasta el 13 de agosto de 2024, 13 grandes incendios han quemado más de 700.000 hectáreas de la región de Ática, en la que se ubican Atenas y El Pireo.

Los datos del Copernicus Fast Mapping Service y el Observatorio Europeo de Incendios Forestales (EFFIS) apuntan a que, en los últimos 8 años, se ha quemado 182.000 hectáreas, suponiendo el 26% de la superficie total de la región y al 37% en lo que se refiere a la masa forestal.