Un hombre fue abatido a tiros durante la tarde de ayer en las escaleras de Notre Dame, París (Francia) tras agredir a un agente de Policía con un martillo. Este suceso llega en un momento en la que todas las alertas están al máximo tras los ataques producidos en Londres el pasado sábado.

Al parecer, el sujeto se abalanzó sobre un agente empuñando un martillo al grito de “¡esto es por Siria!”, muriendo por un disparo en el pecho propinado por el compañero del policía, según ha informado Gerard Collomb, el ministro galo del Interior, que reveló que se trataba de un “estudiante argelino”.

A su vez, ha desvelado que el hombre cargaba con “cuchillos de cocina”. Aunque se cree que actuaba de forma solitaria se está investigando su entorno. Por su parte, las heridas del policía no son graves pero podrían “haber sido peor si su compañero no llega a reaccionar”, tal y como relata Collomb.

Se ha pedido a los ciudadanos que se evite la zona y las estaciones de Saint-Michel, de la línea 4 del metro y del RER B han sido cerradas.

Durante el suceso, que se desató pasadas las 16:00, las fuerzas de seguridad acordonaron la zona confinando a un millar de personas que visitaban la catedral gótica en su interior. Según reveló un turista les pidieron que se sentaran y levantasen sus manos para buscar a algún cómplice del atacante entre el gentío.

Entre este grupo se encontraba la Nancy Soderberg, la exviceasesora de Seguridad Nacional de la Casa Blanca y exembajadora estadounidense en la ONU, que envió su propia información a través de las redes sociales.