Un turista británico de 27 años se enfrenta a 3 años de prisión tras ser detenido en Dubái por tocar a otro hombre.

El pasado mes de julio, Jamie Harron cruzaba a través de una multitud en el bar y mientras esquivaba personas para evitar tirar su copa tocó la cadera de un hombre. Este inocente gesto llevó a que fuese detenido bajo cargos de “indecencia pública” y consumo de alcohol.

Ahora, su pasaporte está confiscado, le han despedido de su trabajo de electricista en Afganistán y ya ha gastado más de 39.000 dólares en su defensa. Lo peor está por llegar puesto que se enfrenta a una pena de tres años de prisión. 

Radha Stirling, CEO de la organización Detained in Dubai ha asegurado que “es bastante indignante que haya estado retenido en el país por tanto tiempo”. Desde esta ONG sostienen que “este es otro ejemplo de cómo los turistas son vulnerables a la detención en Dubái” y de lo “desorganizados que son los procedimientos legales". 

Por su parte, la Oficina de Asuntos Exteriores de Reino Unido ha asegurado que “están en contacto con el ciudadano británico” y le están otorgando “asistencia consular”.