Los defraudadores le han costado 7.693 millones de euros a los turistas británicos. Según publica un informe de la Asociación de Agencias de Viajes de Reino Unido (ABTA).

Según recoge 'Travel Mole', durante 2017 se registraron 4.700 casos de estafa. Esto supone el primer descenso registrado en los últimos diez años. No obstante, se cree que los números podrían ser aún mayores, ya que muchas de las personas engañadas no denuncian ante la policía.

La mayoría de casos se producen en la compra de billetes de avión (47%) o en la reserva de alojamiento (38%). Los fraudes se concentran en los viajes rumbo a África (54%) o Asia (24%).

El año anterior, 2016, se produjeron un total de 5.826 casos en los que se robaron 8.271 millones de euros. Así, mientras el número de incidentes ha disminuido, ha aumentado la cantidad de dinero que se ha perdido, de hecho, la subida es de un 25%.

Casi la mitad de las víctimas aseguran que el fraude ha tenido un fuerte impacto sobre su salud y su bienestar financiero, llegando algunos incluso a necesitar tratamiento médico o quedarse al borde de la bancarrota.

La ABTA y la Policía Metropolitana de Londres colaboran en una campaña conjunta para prevenir a los usuarios del peligro de ser estafados cuando reservan sus vacaciones.