La ciudad de Valencia se está planteando implementar reajustes en el Impuesto sobre Bienes Inmuebles para gravar de forma diferente a aquellas viviendas destinadas al alquiler turístico.
De esta forma, el Ayuntamiento liderado por Joan Ribó establece que aquellos que obtienen un lucro a través de su inmueble deben pagar más en el impuesto municipal. El propio Ribó ha revelado que están “estudiando cómo se podría hacer”, aunque ha revelado que han descartado la implantación de una tasa sobre las viviendas turísticas como la que quiere implantar el Ayuntamiento de Madrid.
No obstante, el regidor valenciano destaca que “la rigidez de la Ley de Financiación Local” da poco margen de maniobra para poder hacer realidad su objetivo. En caso de conseguirlo, se convertiría en la primera ciudad española que aplica este tipo de ajustes.
Valencia recibió en 2016 casi dos millones de visitantes, que generaron 4,5 millones de pernoctaciones.
