Ryanair ha recibido 671 inspecciones desde 2015 por parte de la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA), con el fin de verificar la correcta actuación de la aerolínea con sus viajeros, en casos de denegación de embarque, cancelación o gran retraso de sus vuelos.

Según ha informado 20 minutos, el Ministerio de Fomento ha sido el encargado de confirmar esta información como respuesta al grupo político Unidos Podemos, que lanzó una serie de preguntas al Gobierno de Pedro Sánchez para conocer los controles establecidos a la ‘low-cost’, a raíz de las huelgas convocadas los días 25 y 26 de julio, por los tripulantes de cabina (TCP).

A este respecto, el departamento aseguró que la AESA inició una investigación en diferentes aeropuertos españoles, donde controló las acciones tomadas por el personal de Ryanair para cumplir con la normativa y derechos de los pasajeros. También, recabó diferente información. Aena, por ejemplo, le transmitió que “prácticamente la totalidad de los vuelos” fueron operados durante los días de huelga y los que no, se cancelaron por cuestiones ajenas.

Fomento también reconoció que hubo cancelaciones de vuelo antes de establecer los servicios esenciales, así como que “no existe legislación que impida a una compañía aérea la cancelación de vuelos siempre que cumpla con el reglamento sobre derechos de los pasajeros". Por último, el ministerio puntualizó que AESA carece de competencias en lo que a condiciones laborales se refiere, como para realizar una inspección de este calibre en Ryanair. Este apunte lo hizo por la posible vulneración del derecho de huelga de la aerolínea a sus trabajadores, al enviarles un cuestionario para conocer quién secundaría los paros.