El Govern balear ha decidido no poner límites a los coches de alquiler este verano, según informa el ‘Diario de Ibiza’. Un informe encargado por la consejería de Turismo, especifica que para llevar a cabo la medida se necesitaría un estudio sobre la capacidad de carga de las carreteras de cada una de las islas baleares.

Desde el Ejecutivo aclaran que la normativa europea se inspira en la libre competencia y para ponerle límites deben justificarse con claros motivos ambientales o territoriales. Por esa razón encuentran “complicado” poner un techo a esta cuestión.

En el estudio se afirma que “la pertenencia a la Unión Europea no permite discriminar a los vehículos de las empresas de alquiler respecto de los vehículos particulares de los residentes, ya que atentaría contra la libre circulación de mercancías y el principio de igualdad”. Luego agrega que sólo se podrán imponer restricciones cuantitativas cuando estas estén “justificadas por un interés general y no económico”, como podría ser la protección del medio ambiente.

Fuentes de la consejería de Turismo aseguran que no descartan la posibilidad de gravar los coches de alquiler con una tasa, aunque debería ser “muy elevada para que fuera efectiva en la disminución del número de vehículos”.

Turismo calcula que el último mes de agosto circularon por las carreteras de Baleares 74.200 coches de alquiler. En Mallorca fueron 53.952, sin embargo, la patronal de las pequeñas y medianas empresas de vehículos de alquiler (Aevab) cifra en 120.000 los turismos arrendados durante la temporada estival pasada.