El ‘culebrón’ de la compañía de cruceros Crystal Cruises parece estar llegando a su fin. “Desafortunadamente, este es el final de Crystal Cruises y no sabemos qué va a pasar en el futuro”. Estas fueron las palabras del capitán del Crystal Serenity emitidas por el sistema de megafonía del barco. El oficial también aseguró que “todas las oficinas de la naviera en Estados Unidos están cerrando” y que “los barcos se encuentran a la venta”.

Cabe recordar que durante el pasado mes de enero la naviera anunció que suspendía todas las operaciones debido a la crisis financiera que experimenta su matriz. Tras el anuncio, las autoridades estadounidenses lanzaron una orden de incautación para sus barcos Crystal Serenity y Crystal Symphony —por una deuda millonaria en concepto de combustible—, que huyeron hacia aguas internacionales aunque la semana pasada, en aguas cercanas a las Bahamas, los buques fueron confiscados y sus tripulaciones permanecen dentro a la espera de más información. Por su parte, el capitán del Crystal Serenity ha asegurado que aguarda una declaración que no llega del presidente de Crystal Cruises, Jack Anderson.



 

De forma paralela, varios miembros del personal de tierra de Crystal Cruises han reportado a Crew Center que desde la empresa se les avisó que su último día de trabajo sería el 9 de febrero y que la oficina de Miami (Florida, Estados Unidos) cerraría.

Desde el citado diario también aseguran que V.Ships Leisure asumirá la gestión de los barcos y será la encargada de venderlos. Diversas fuentes apuntan a que los buques se venderán de uno en uno y no como un lote.