Siguiendo los modelos de Dinamarca y Alemania, el gobierno holandés impondrá a sus reclusos el pago de 16 euros diarios durante el tiempo que estén en prisión. El proyecto de ley nace de los acuerdos entre liberales de derechas y socialdemócratas y tiene como objetivo que los delincuentes asuman el coste de sus actos y que el gobierno pueda ahorrar. Se calcula que dicho ahorro podría alcanzar los 65 millones de euros en gastos judiciales y policiales. La propuesta se debatirá en el Parlamento el próximo año. "Se trata de que el preso entienda que forma parte de la sociedad, y si comete un delito, tiene la obligación de contribuir al gasto que ocasiona", ha explicado el portavoz de Justicia, Johan van Opstel. Las cárceles holandesas tienen capacidad para 12.000 reclusos, que el año próximo podrían empezar a pagar por sus celdas, como si se tratara de un hotel penitenciario. Tendrán, eso sí, facilidades para los pagos, en caso de que no cuenten con dinero disponible. Según aclara Van Opstel, podrán pagar cuando dispongan de un sueldo, con el fin de no entorpecer la reinserción social. Oficialmente se espera poder recaudar 11.680 euros por interno