Grecia no aceptará solicitudes de asilo por parte de migrantes africanos durante los meses de julio, agosto y septiembre, coincidiendo con la temporada alta de verano en la que el país espera recibir a millones de turistas, con 28,2 millones de asientos en vuelos internacionales programados.
Según informa Euronews, el Parlamento Griego —por 177 votos a favor y 74 en contra— ha aprobado la resolución por la que se suspenden temporalmente el procesamiento de solicitudes de asilo de personas procedentes del norte de África, tras el aumento del flujo migratorio —con la llegada de hasta 1.000 personas al día— que ha desbordado los centros de recepción ubicados en la turística isla de Creta.
Para justificar la medida, han alegado que las autoridades de la isla cretense están teniendo dificultades para proporcionar servicios a las personas acogidas, procedentes principalmente de Somalia, Sudán, Egipto y Marruecos.
Desde Naciones Unidas ya han expresado su preocupación por la resolución del parlamento heleno. Si bien reconocen el derecho de Grecia para gestionar sus fronteras, subrayan que el asilo es un derecho fundamental. “Incluso en tiempos de presión migratoria, los Estados deben garantizar que las personas que buscan asilo tengan acceso a los procedimientos de asilo”, afirma la entidad en un comunicado.