Los inversores de la industria de los cruceros han comenzado a mostrar su preocupación ante un incremento desproporcionado del número de barcos. Según ha publicado el medio especializado Travel Weekly, existen 90 órdenes para construir cruceros hasta 2025 que suponen un inversión de 55 mil millones de dólares. 

En 2019 se entregarán 16 buques, entre los que destacan el Symphony of the Seas de Royal Caribbean International, con capacidad para 5.400 pasajeros; el Aidanova de Aida Cruises, para 5.000 pasajeros; el Norwegian Bliss de Norwegian Cruise Line para 4.200 pasajeros y el MSC Seaview de MSC Cruceros para 4.138 clientes. 

El peligro de que el número de atraques exceda el de la demanda de los pasajeros radica en que las compañías se verán forzadas a reducir los precios para mantener las reservas y perjudicarán las ganancias esperadas por los inversores. 

Arnold Donald, director ejecutivo de Carnival Corp ha explicado que la solución se encuentra en mantener el crecimiento de la capacidad en un número aceptable. Aunque su compañía posee más de 100 barcos en su flota y prevé agregar cuatro más en 2018, solo aumentará su número de atraques en un 1,9%. 

Otras empresas, como Royal Caribbean y Norwegian Cruise Line también han defendido su crecimiento controlado.