Este domingo, 18 de mayo, volvieron a celebrarse manifestaciones contra la masificación turística en Canarias. Discurrieron marchas en siete de las islas, así como en otras ciudades de la Península y Berlín (Alemania), siendo el encuentro más multitudinario el de la isla de Tenerife.
No obstante, tal y como recoge El País, vuelve a producirse el baile de cifras entre la Delegación del Gobierno y los convocantes —la plataforma Canarias Tiene un Límite—. Las autoridades apuntan a una totalidad cercana a los 23.000 manifestantes, mientras que los organizadores disparan la cifra a los 140.000.
Siguiendo los datos oficiales, en Santa Cruz de Tenerife se congregaron 15.000 personas, en Las Palmas de Gran Canaria se dieron cita 5.000. Por su parte, en Lanzarote se reunieron 2.000, en Fuerteventura y en La Palma, otras 500, respectivamente. En Madrid, el seguimiento contó con 300 participantes.
En su manifiesto, se ha pedido una “moratoria hotelera y vacacional real”, una ley de residencia que “ponga freno a la llegada masiva” de personas y una ley que garantice el derecho a una vivienda digna y accesible. A ello se agrega la aplicación de una "ecotasa real" y la protección de los espacios naturales.