El turismo en Islandia ha experimentado un crecimiento sin igual desde 2010. Según datos del gobierno islandés, el pasado 2016 el país alcanzó su mayores niveles de ocupación hotelera y registraron una cifra record de turistas, registrando casi un millón ochocientos mil visitantes. Por su parte, el aeropuerto de Keflabik, en Reikjavik, aumentó en un 40% la llegada de visitantes con respecto al 2015 y entre sus principales turistas destacan los españoles, canadienses y estadounidenses.

Las estrategias de las compañías de turismo es ahora conseguir desestacionalizar la llegada de visitantes y convertir a Islandia, también en Invierno, en un destino atractivo. Un objetivo que parecen estar consiguiendo, puesto que diciembre de 2016 la isla vivió un espectacular crecimiento de hasta un 411,6% más de visitantes que el año anterior, lo que remarca su capacidad para ser visitada y disfrutada en cualquier época del año.