Una nueva experiencia para los turistas llega a Mallorca. Las bicicletas acuáticas ya surcan las aguas de Cala d’Or, Muro, s'Arenal o Cala Gamba. A diferencia de las motos acuáticas, las bicicletas son eléctricas, por lo que son más respetuosas con el medio ambiente.
“Es fácil porque cualquier persona que sepa nadar y montar en bici puede usarlas”, explica a Diario de Mallorca Samuel González, director comercial de Salty Cycling en Baleares, una de las empresas que comercializa este tipo de vehículos en las playas mallorquinas. Otro de los requisitos es ser mayor de edad.
González detalla también que dichas bicicletas acuáticas son similares a las que se utilizan en una clase de spinning —ya que también tienen la opción de pedalear, en lugar de utilizar el motor—y que, en caso de sentir que los músculos se fatigan, siempre se puede reducir la resistencia. La velocidad máxima que alcanzan estos vehículos es de nueve nudos, es decir, unos 20 km/hora.
El director comercial ha afirmado que para el año que viene Salty Cycling tiene una previsión para Mallorca de unas 200 bicicletas.
