Cada año por estas fechas nos volvemos locos buscando todo lo que nuestros hijos van a necesitar para volver a sus clases: libros, libretas, lápices, sacapuntas, gomas, estuches, nuevas mochilas porque la del curso pasado está destrozada, uniformes, zapatos... ¡Uf!, toda una odisea para los papás, pero nos olvidamos de lo que están sintiendo los niños, qué piensan, qué les angustia, qué les motiva…

A ver, entiéndanme, no quiero decir que no nos importe qué están sintiendo, ¡por supuesto que nos importa!, pero ante nuestra angustia por llegar a tiempo a la fecha indicada con todo listo, suele quedar en un plano no tan angustioso el verdadero motivo de comprar todo eso: nuestros hijos.

Niños en el colegio

Como empresas dedicadas a generar experiencias positivas en nuestros clientes, ¿hemos pensado alguna vez que podríamos aprovechar este tipo de acontecimientos por el que pasan las familias de todos los países?

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Mi anterior artículo trataba sobre el turismo experiencial y comentaba que habíamos abusado de ese término, pues se utilizaba como reclamo turístico y el cliente realmente no vivía una verdadera experiencia que recordaría toda su vida. Pues bien, este tema de hoy, “la vuelta al cole”, puede ser motivo de una verdadera experiencia para las familias, pero es cuestión de creatividad por parte de los equipos de marketing de nuestros hoteles.

Uy, he dicho creatividad…, pues si CREATIVIDAD, en mayúsculas. Estamos buscando constantemente nuevos temas que desarrollar para atraer a nuestros clientes, se nos van las ideas hacia temas verdaderamente especiales, algunas veces inalcanzables y la mayoría de veces pasamos por alto lo que tenemos delante de nosotros que, por ser algo cotidiano, no caemos en ello.

Ceras de colores

La vuelta al cole son fechas señaladas, como el inicio de las vacaciones, las navidades, fin de año, semana santa o lunas de miel, pues aprovechemos esas emociones que las familias y, mucho más los niños, llevan acumuladas a presión, para ofrecerles una verdadera experiencia que no olviden y que provoquen que el año siguiente quieran volver a nuestro hotel.

¿Qué os parece la idea?, ¿creéis que puede ser motivo de una semana o un fin de semana especial en
nuestros hoteles, pensando en un Turismo Experiencial?

Ya me contaréis, espero vuestras opiniones.