Me refiero al periódico madrileño y a su capacidad de razonar, que con la ‘chinomania’, que está afectando a muchos periodistas, ha ido hasta límites realmente preocupantes.

En su edición del pasado 11 de febrero dedica un amplio reportaje firmado por 'O.R' al turismo chino hacia España, la importancia actual que tiene, la que va a tener en el futuro y a la necesidad de que aumente la promoción en ese país y se faciliten la emisión de visados.

Nada que objetar si no fuera porque claramente se aboga por desatender a nuestros mercados europeos, Reino Unido y Alemania “donde ya saben todo lo que necesitan saber sobre España” y se quejan de que solo haya dos oficinas de Turespaña para atender a un mercado de 1.400 millones de habitantes. Obvia el periodista que en Gran Bretaña solo hay una y que el incremento de turistas británicos a España el pasado año fue el doble que el total de los chinos que nos visitaron. En el caso de Alemania fue un 30%.

La inspiración de Global Blue, la empresa que gestiona la devolución del IVA a los extracomunitarios es evidente. El reportaje incluye incluso un artículo de su director. A esta empresa poco le importan los mercados británico y alemán. El Corte Inglés  apoya esta deriva, pero lo hace de manera sutil.

Suscripción

 El artículo desbarra en cuanto empieza a dar cifras. Afirma que el año pasado vinieron 718.000 chinos, aceptando lo señalado por una asociación hispano china, cuando los datos oficiales de Frontur -en mi opinión inflados- dan la cifra de 515.000, un mero 5% de los que viajan a la Unión Europea, que recibiría, según esta versión, 15 millones  de turistas chinos. Cabe destacar que la cifra oficial es de cinco millones y la real de algo mas de tres-, mientras que Italia habría recibido 3 millones y 1.700.000 Francia, cifras fuera de lugar, incluso sin tener en cuenta que muchos están doblemente contados al visitar ambos países.

Confundiendo gasto total, que incluye el transporte y consumos en origen, con el gasto en destino, indica que “ el gasto medio por turista en España”  es de 2.593 euros cuando en realidad no pasaría de 1.300.

China, según la versión del diario madrileño, habría alcanzado los mil billones de euros de PIB ya en el año 2.000, cuando en realidad es de algo más de 10 billones en la actualidad.

Y ya, calculadora en mano y multiplicando 718.000 por 2.593 saca la conclusión de que los chinos se gastaron el año pasado en España casi dos billones de euros –prácticamente el doble de nuestro PIB- , pero lejos de los 8 billones de Italia -más de cinco veces su PIB-. Recomendamos al periodista que se compre una nueva calculadora.

Y para rematar, asegura que el 50% son millenials, es decir, “menores de treinta años”, cuando es bien sabido que esa generación debe su nombre a que alcanzo la mayoría de edad alrededor del milenio, y no hace falta calculadora para sumar 18 y 18 .

En la misma fecha se publicó una información procedente de CTRIP, la mayor agencia de viajes digital de China, según la cual el número de viajes a España habría aumentado un 127% en el 2017, año en el que China se habría convertido en el primer emisor de turistas a diversos países asiáticos y al Reino Unido. Y los ingleses sin enterarse.

Y todo con la disculpa de buscar turistas de mayor gasto, que serían más fáciles de encontrar en los caladeros tradicionales de Europa y América, en los que tenemos ventajas relativas de las que carecemos en China.