Tras el cese de operaciones de Thomas Cook en la noche del domingo, 22 de septiembre, la presidenta de la Federación Empresarial Hotelera de Mallorca (FEHM), María Frontera, y el presidente de la Agrupación de Cadenas Hoteleras (ACH), Gabriel Llobera, han valorado esta mañana la situación y han informado sobre las actuaciones que se están llevando a cabo por parte de la patronal.

Frontera ha destacado que se trata de “una situación sin precedentes de quiebra de un turoperador que tiene una gran cuota de mercado y abarca múltiples mercados, lo cual, obviamente, genera preocupación en el sector. De momento tenemos un escenario de cese de la actividad de la compañía en el Reino Unido y estamos muy pendientes de lo que suceda con otros países como Alemania y Escandinavia”.

La presidenta de la FEHM ha señalado que ahora la prioridad es el “compromiso del sector empresarial hotelero con los clientes que nos visitan”. En este sentido ha señalado que lo primero es “atender a los clientes que se han visto afectados para ayudarles en su vuelta a casa de una forma ordenada y lo menos traumática posible” para lo cual la FEHM está en constante comunicación y coordinación con los agentes implicados en el proceso.

Ante este escenario, la FEHM y ACH están trabajando para cuantificar el número de empresas y personas afectadas e igualmente están ofreciendo asesoramiento jurídico a sus miembros. “Mantenemos una coordinación total con las administraciones que tienen competencia en este asunto para ir informando puntualmente a nuestros asociados de todas las novedades que se vayan produciendo”, ha destacado Gabriel Llobera. Ha matizado que se está trabajando con un gabinete jurídico especializado, Monlex Abogados, para poder dar la asistencia a los miembros de la FEHM en materia de procedimiento y posibilidad de reclamaciones.

Por último, María Frontera ha destacado que están "explorando posibilidades para instar a la Administración a adoptar medidas financieras que permitan la viabilidad de las empresas en la medida en que se hayan visto afectadas por la quiebra”. “El impacto del cese de actividad de Thomas Cook es de tal envergadura que muchas empresas que tienen un alto grado de exposición y dependencia ven seriamente comprometido su futuro. De ahí que se reclame a la Administración central y estatal evaluar de forma rápida los mecanismos que se podrían activar”.

Igualmente han explicado que tendrán que estudiar, junto al Consell de Mallorca, qué campaña de mitigación se puede implementar a corto plazo.