Con motivo de la celebración de la feria ITB de Berlín, que se está llevando a cabo del 9 al 12 de marzo de manera virtual, el presidente y fundador de Alltours, Willi Verhuven, ha abordado las optimistas expectativas que actualmente tiene el Govern de Islas Baleares de cara a la temporada turística de verano.
En primer lugar, Verhuven ha felicitado los esfuerzos llevados a cabo en las islas mediterráneas para bajar la incidencia y contener los contagios, que de hecho han sido premiados por el grupo con la apertura de sus hoteles el próximo 17 de marzo. De hecho, se ha comprometido a cumplir “con la parte que le toca” y llevar entre 200.000 y 400.000 turistas alemanes a Mallorca durante este verano.
Sin embargo, Alltours trata de imponer algunas condiciones para el traslado de turistas al Archipiélago, especialmente, a Mallorca, durante este verano.
Test obligatorios a todos para poder entrar
Para el grupo turístico la primera condición indispensable es que, sin depender del nivel de riesgo del lugar de origen, todos los viajeros que lleguen a las islas tengan la obligación de presentar una prueba diagnóstica de Covid-19 a la llegada a los puertos y aeropuertos baleares, incluidos los pasajeros nacionales.
“El verano pasado, los políticos cometieron el error de no realizar pruebas a los pasajeros nacionales. Incluso a los viajeros procedentes de zonas de alto riesgo como eran Madrid y Barcelona. Este error no debe repetirse”, han señalado desde Alltours.
Baleares da el golpe final al turismo de borrachera
“Vacaciones placenteras sí, imprudencias no”
Otra de las condiciones que el grupo turístico alemán trata de establecer es que se impongan limitaciones al 'turismo de borrachera'. Alltours vuelve a señalar los “errores cometidos el año pasado” que provocaron un ascenso de los contagios y, aunque no tiene nada en contra de la apertura de los bares y restaurantes, considera que deben hacerlo “cumpliendo siempre con las normas de higiene y seguridad”.
Por otro lado, “en lugares de fiesta como la Playa de Palma”, los horarios de locales y discotecas deberían estar limitados y debería haber más controles, según Alltours. "La mala conducta de algunos no debe de perjudicar a los numerosos turistas sensatos, ni a los empleados de la hostelería", ha añadido Verhuven.
