Las Federaciones Hoteleras de Baleares se rebelan contra la ‘enmienda March’. Una iniciativa propuesta por el alcalde de Pollença, Martí March, y muy bien acogida por el Govern de Islas Baleares, que propone permitir el alquiler turístico de aquellas viviendas en suelo rústico que hoy día se encuentran fuera de ordenación, pero serán regularizadas con la ‘amnistía urbanística’.
Concretamente, la Federación Empresarial Hotelera de Mallorca (FEHM), Asociación Hotelera de Menorca (ASHOME) y la Federación Empresarial Hotelera de Ibiza y Formentera (FEHIF) han publicado un manifiesto enumerando los motivos por los que están en contra de esta medida, situando en el centro de su razonamiento el problema habitacional con el que se encuentran ahora mismo miles de baleares. Asimismo, los empresarios consideran que se trata de un “planteamiento contradictorio con otras acciones y políticas que está impulsando en propio Govern”, como el Pacto por la Sostenibilidad Política y Social.
“Resulta particularmente preocupante que mientras el Govern balear está promoviendo un proceso de diálogo para un pacto social y global que aborde los problemas de congestión, gentrificación y escasez de vivienda, se esté considerando, por otro lado, una enmienda que sigue favoreciendo el uso turístico en viviendas en las que este iba a desaparecer”, explican las federaciones en el comunicado.
Desde las asociaciones hoteleras baleares consideran que debe existir un equilibrio entre el desarrollo económico y la protección de los derechos básicos de la población, como es el caso de la vivienda. Por este motivo, solicitan “con firmeza” que se reconsidere, “por coherencia y responsabilidad”, la aceptación de cualquier enmienda que “no actúe respecto a las necesidades y prioridades reales de la población balear”.
