Próximamente, visitar el Park Güell será un poco más difícil, pues el Ayuntamiento de Barcelona y Esquerra Republicana han alcanzado un acuerdo por el que reducirán en medio millón el número de turistas que visitan anualmente una de las obras más icónicas del arquitecto Antoni Gaudí.
“Esta es una medida imprescindible, queremos que este parque sea recuperado por los barceloneses y barcelonesas”, ha dicho la líder republicana en el consistorio, Elisenda Alamany, desde el acceso principal al parque.
La reducción de medio millón de visitantes —actualmente recibe a 4,5 millones al año— supondrá la entrada de 1.365 turistas menos cada día y 130 menos cada hora, reduciendo la presión sobre los barrios de Gràcia y Horta-Guinardó, cuyos vecinos han protagonizado diversas manifestaciones de protestas.
Pérdida de ingresos
La medida tendrá impacto en las arcas del ayuntamiento barcelonés, ya que todo turista que quiere acceder al Park Güell debe pagar por su entrada entre 13,50 € y 18 €. Solo en 2023, se recaudaron 34,7 millones de euros, gracias a los 4,47 millones de visitantes registrados.
Así, si entra en vigor el nuevo límite pactado, habrá que restar medio millón de visitantes, dejarán de ingresar en torno 6,75 y 9 millones de euros.