Pamplona acoge, un año más, imágenes y sucesos que ya forman parte de la “cara oscura tradicional” en la celebración de los sanfermines.

Fiesta, diversión y alcohol, es lo que muchos –tanto visitantes extranjeros como nacionales- buscan y, lo que hace que las calles de la ciudad se llenen de cientos de jóvenes medio inconscientes y al borde del coma etílico, kilos de basura -sobre todo botellas y vasos de plásticos-, turistas borrachos realizando el famoso “salto del guiri”, e incluso desnudos y abusos sexuales.

Sin embargo, la noticia más sonada esta semana, ha sido el caso de una pareja que fue “pillada” teniendo relaciones sexuales en lo alto de un tejado, un acto que rápidamente se ha virilizado en las redes.

En el vídeo, que fue grabado por la atónita mirada de algunos vecinos que se encontraban en los pisos de enfrente, se puede ver a un chico y una chica, únicamente tapados por una sábana, intimando sobre tejas y rodeados por chimeneas, antenas y cables.

Esto pone, nuevamente, en evidencia, las conductas incívicas que se viven en estos festejos. Una estampa de desenfreno que no agrada a los pamploneses, pero que dificilmente puede ser controlada y erradicada. 

 
También ha sido bastante sonado el intento de 'simpa' de 14 ciudadanos italianos que tras disfrutar de cena y chupitos quisieron evitar la factura que ascendía a 620 euros. Finalmente, pagaron el importe mediante la intervención de la Policía Foral.
 

Otro de los incidentes más sonados durante estos festejos fue el acoso sufrido por una reportera de Espejo Público, de Antena 3. La periodista se quedó sola y comenzó a grabar con el móvil un clip en el que varias chicas admiten recibir tocamientos y tener miedo. Durante la filmación, la profesional tuvo que soportar que dos individuos intentaran besarla en dos ocasiones a pesar de su negativa.